Irlanda multa a Meta con 265 millones por una brecha que expuso los datos de 500.000 usuarios

Dura sentencia judicial para Meta, la compañía propietaria de plataformas como Facebook, Instagram y WhatsApp, que ha sido condenada a pagar una multa de 256 millones de euros en Irlanda. La sanción se impuso este lunes debido a deficiencias en la seguridad de las redes sociales, tras una brecha que expuso datos personales de hasta 500.000 usuarios.

La Comisión de Protección de Datos de Irlanda determinó que el gigante tecnológico, que está experimentando dificultades, violó dos artículos del Reglamento General de Protección de Datos (GDPR) de la Unión Europea (UE) al sufrir esta violación de privacidad entre 2018 y 2019. Durante ese incidente, se filtraron datos como números de teléfono móvil y direcciones de correo electrónico de miles de usuarios, siendo un número «significativo» de ellos ciudadanos europeos.

La investigación se inició después de que el año pasado estos datos personales se filtraran en un portal frecuentado por cibercriminales que los adquieren para personalizar ataques informáticos contra sus víctimas.

La autoridad de protección de datos de Irlanda es responsable de regular a Meta a nivel europeo, ya que la empresa tiene su sede fiscal en la UE. Con esta multa, la cantidad total de sanciones impuestas a la compañía liderada por Mark Zuckerberg desde septiembre de 2021 asciende a casi 1.000 millones de euros.

En septiembre pasado, el organismo impuso una multa de 405 millones de euros a Meta por permitir que usuarios de entre 13 y 17 años pudieran abrir cuentas comerciales en Instagram, configuradas por defecto como públicas, exponiendo así los datos personales de los menores. En septiembre del año pasado, la sanción fue de 225 millones por infracciones «graves» y «severas» de WhatsApp contra la legislación europea.

La sanción del regulador irlandés obliga a Meta a implementar «una serie de medidas correctoras específicas en un plazo determinado». El lunes pasado, la empresa anunció una serie de medidas para proteger la privacidad de los menores en sus plataformas y detectar a los adultos que puedan tener comportamientos sospechosos.